Se trata de un impresionante conjunto histórico perfectamente conservado, donde destaca la Colegiata de Santa Juliana, del siglo XII. Es el lugar más visitado de Cantabria, ya que perderse por sus calles es una auténtica delicia.
Además cuenta con la cueva de Altamira, considerada la capilla sixtina del arte rupestre. Hoy en día podemos visitar la "neocueva", una reproducción exacta de la original y que cuenta con un centro de interpretación.
También hay un curioso zoológico a la entrada del pueblo, que destaca por su colección de monos tití. También hay orangutanes y chimpancés. Es una muy buena opción si se viaja con niños.